sábado, 25 de junio de 2011

EL DEMONIO DE LA HIGUERA

Eran casi las 9 de la noche y la monografía de la guerra con Chile, que tenía que entregar como la Última esperanza de aprobar el curso de historia, estaba a medias. Mis manos temblaban y apresuraban su marcha, al ver el reloj color negruzco de plateadas agujas.
 Tic tac tic tac-
Ese sonido era martirizante se asemejaba al sonido que producen los pasos de un verdugo  que va hacia la palestra.  La esperanza menguaba, desaprobaría por vez primera el curso de historia?, no, esa no era una opción. Una beca de pregrado me esperaba en España y por una simple monografía como esa no la perdería.
Beligerancia, beligerancia… no, ya no recordaba palabras sinónimas de guerra, se me habían agotado.   Mi cerebro empezó ha  combustionar y las ideas se evaporaban. Palabras sinónimas, sinónimos…diccionario¡- exclame. El diccionario estaba allí, sobre la mesa al lado de mis libros de secundaria, y sobre él, el reloj verdugo imponía su presencia obscura. Lo observé entreteniéndome con su baile lento de espadas, era asombroso como controlaba el tiempo, como cortaba los segundos con sus filudas hojas plateadas, en efecto era un verdugo. 
Necesitaba el diccionario, asi que extendi mi brazo para retirar al verdugo de su lugar,  las llemas de mis dedos rozaron su superficie helada y este cayo estrellándose con el suelo- Chirrrrrrssssshssssss!!
Los vidrios que componían su forma se dispersaron por la habitación. El chirriante ruido alteró mi respiración  Mi corazón bombeaba mas, pero quizá fue mejor dejar de controlar el tiempo, al menos así podría leer y escribir mas en ves de ver como se consumían mis segundos. Di un suspiro y recobre la calma, esa calma  que intentó escapar por las hendiduras del cuarto.
Ya tenia escrita dos caras y media, que conclusión sacaría de de una guerra en la que perdimos, teníamos muchos héroes a quienes podía elogiar y decir que el país se levantó de la desgracia, pero esa conclusión no me convencía totalmente, tenia que averiguar algunos detalles…
Jiaurrrrrrr-
Escuche un ruido extraño, que provenía de la huerta, fui hacia la ventana para ver de donde provenía semejante ruido. La densidad de la ventana me impedía observar a detalle las figuras de la huerta.  Pude con mucho trabajo visual, distinguir  la silueta de la vieja higuera, que se esbozaba al tener contacto con la densa llovizna que amenazaba en  convertirse en una torrencial lluvia.
Un largo bostezo, el sueño me envolvía, serré por unos segundos los ojos. Los volví a abrir y en la huerta pude ver a muchos hombres y mujeres que arrastraban unas cadenas que finalizaban en rocas enormes. Sus rostros eran pálidos y tristes, algunos llevaban en sus sacos y bolsos; botellas de ron y por el suelo había varias colillas de cigarros, otros arrastraban viejos fisiles ensangrentados, que dibujaban en el suelo hilos de negras masas de los cuales iban lamiendo unos infantes deformes y desnudos. Todos empezaron a fundirse en esa masa negra.
-Miau-
Volví a parpadear, y todo recobro su forma, había sido un sueño pero no podía rendirme a el ahora. Me dirigía hacia el escritorio.
Las hojas, todas estaban embarradas por un líquido espeso, blanquecino como la sabia de la higuera- el gato, habrá sido el gato- pensé.  En eso volví ha escuchar su maullido. Ese gato plomizo, de pelaje largo se acercó a ronronearme en la pierna, lo alcé para ver sus patas, pero este salto al suelo y empezó ha caminar hacia la puerta que daba con hacia huerta, lamió una de sus patas y volteo su mirada hacia mi;  sus ojos no contenían fondo alguno, estaban vacíos. – ser{a el efecto de la luz- me dije como intentando tranquilizarme, el gato dio unos pasos mas hacia la puerta y saltó a ella traspasándola como si fuera un ánima.
La presión en mi cuerpo disminuyó, mis manos empezaron a helarse, quise llamar a alguien, pero se apagó al llegar el recuerdo de la mañana que me repetía macabramente que mis familiares no iban a pasar la noche en casa.
Me pellizqué dos veces hasta ver sobre mi piel círculos morados, decidí acabar de una ves con esa monografía que me estaba causando alucinaciones...
...
continuará

Fragmento del cuento el demonio de la higuera, escrito en el año 2005

por /B/ malkip

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